Esta vez traemos una de las recetas más simples y sabrosas que se pueden hacer, un buen plato de berenjenas con miel. Una receta simple pero eso no significa que esté realmente exquisito el producto final. Ya veréis. Aquí tenéis los ingrediente que harán falta:
2 berenjenas
3 cucharadas de miel de caña
5 cucharadas de harina
1 cucharada de sal
Aceite de oliva para freír
Preparar las berenjenas
El primer paso va a ser preparar las berenjenas para ser cocinadas. Esto significa quitar las hojas que puedan tener, cortarlas en bastones de tamaño similar. Tras esto las lavaremos y las dejamos escurriendo (durante unos diez o quince minutos para que echen el amargor) y, en este momento, echamos la sal por encima.
Rebozar los bastones
Con los bastones de berenjena ya escurridos, vamos a secarlos para que puedan ser rebozados en la harina. Cuando estén ya rebozados uniformemente las freiremos en una sartén o una freidora.
Echar la miel
Cuando los bastones de berenjenas estén todos fritos las sacamos y, mientras se van enfriando, echamos la miel por encima. La mejor miel es la de caña pero también se pueden usar como alternativas miel de abeja, reducción de Pedro Ximénez o incluso caramelo.
Tras la elaboración lo que toca es lo bueno, disfrutar de la creación. Y no hay nada como la mezcla del sabor frito de las berenjenas y el dulce de la miel, desde fuera puede parecer una combinación curiosa, pero funciona perfectamente y, por eso, llevamos tantos años comiéndolo aquí en Málaga.